martes, 26 de febrero de 2008


Vie 29 Feb / 20:30 hs

Altocamet (Mar del Plata) / Plataforma: Índice Virgen

www.altocamet.com / www.indicevirgen.com


+ SOBRE ALTOCAMET


Pasaron diez años de la edición de Velada Bristol Casino, primer disco del quinteto marplatense Altocamet(devenido en sexteto desde 2002), inspirado y visionado desde años luz, como el Bistró Malaga de Estupendo, a la par de sus contemporáneos europeos. Ensoñación profunda y plagada de imágenes en tonos difusos, con La Feliz fuera de temporada alta, o quizás fuera de este mundo.

Muy de cerca en Mar del Plata pero más prendados al arte sonoro le seguían Boeing (Lionel Castillo, hoy afincado en Mendoza), y Ciudad Feliz (vía Londres). A Velada Bristol… le siguió un disco de remixes de artistas electrónicos argentinos, y el track Pasión Descalza inauguró el sello de los Deep Dish, Shinichi.

La única visita de la banda a la ciudad de Córdoba fue en el año 2002, en el marco de Rouge, dos actividades multidisciplinarias realizadas por el extinto colectivo de artistas Bistró Casares, en el subsuelo del Centro Cultural General Paz. En aquélla ocasión presentaron el EP Manzana de Metal, post producido por Gustavo Cerati, con portada a cargo del fallecido Federico Klemm.

Tiempo después, la banda vivió un interludio debido a la adhesión de Pedro Moscuzza (batería) y Loló Gasparini (corista) a las giras de Siempre es Hoy, tercer disco de Gustavo Cerati. Además Canu (voz, producción) profundizó su carrera solista en la pista de baile acompañado de guitarra y sampler con tres álbumes (Recientemente se alistó en el label cordobés Caramba Rec). Asimismo Pedro Moscuzza llevó al frente el proyecto electrónico Pura, y la tutela del sello Casa Del Puente Discos junto con Cecilia Amenábar.

La vuelta de Altocamet fue en 2006 tras la edición del EP En el parque, cercano al post rock y con la ausencia de la voz de Canu, que produjo en 2007 sus remixes, y señó la vuelta que se completó con la salida del excepcional Mitad del viento. El disco fue producido por Graham Sutton (Jarvis Cocker, British Sea Power) y masterizado por Tim Young (Massive Attack, Pet Shop Boys).


+ SOBRE ÍNDICE VIRGEN

Entrevista a Sebastián Carreras, incluida en el Nº51 de la revista Zona de Obras (Zaragoza, España).

CANCIÓN SIN ARTIFICIO

ESTE AÑO EL SELLO PORTEÑO ÍNDICE VIRGEN CUMPLE UNA DÉCADA DE APUESTAS ARRIESGADAS Y PURA EMOCIÓN LÍRICA. UN PARIENTE CERCANO DE LA ESPAÑA INDIE A MANOS DE SEBASTIÁN CARRERAS, PUNTAL DE ENTRE RÍOS. POR RICARDO CABRAL

Cuando comenzó a declinar la esperanza de situar un escenario musical prolífico al cierre de los noventas, la mayoría de los grupos que formaron el Nuevo Rock Argentino nacido en 1993 se disoció. Pero dos compilaciones de artistas que fraguaron canciones pop en una concepción alejada del mainstream y aliada a la mansedumbre de un cuarto, encontraron asidero en un pequeño sello con aroma indie, esa estética actualizada como una unión entre belleza y melancolía, y más tarde realzada por estelas vivificantes. “Los valores estéticos de los discos publicados en Índice no sé exactamente cuáles son, sé cuales no son. Sé que no es música entretenida…pero sí amena, y es lo que yo llamo pop de autor”, señala Sebastián Carreras, mentor de la casa que reunió entre otros al Leo García más desnudo e incandescente, a un Francisco Bochatón lánguido y amoroso abandonando Peligrosos Gorriones, una suerte de Niño Gusano oscuro y estridente. Por aquéllos días Sebastián se repartía entre el proyecto Tus Hermosos -cimiente del trío indietrónico Entre Ríos-, las primeras ediciones del sello, y un trabajo de ocho horas en otro rubro diferente a la música. Así vieron la luz obras que para cualquier operador hubiesen sido un flagelo comercial, como los discos del maximalista maldito Esteban Castell, o la retrospectiva sobre los power pop Menos Que Cero (hoy parte de Valle de Muñecas). Hasta que llegó un número que coartó al país entero: 2001. “Perdí todo lo que pude haber capitalizado a fines de los 90. La aparición de la música electrónica en el pop le dio esta sobrevida al sello, pero solo en términos estéticos, no económicos”, apunta sobre el giro que arremetió en su catálogo, cuando Entre Ríos comenzó a crecer y llegó a cruzar el Atlántico para dar con Elefant Records. Una filiación con España que nació de las publicaciones que Índice realizó con Le Mans luego de su escisión, y la visita de Ibon Errazkin y Teresa Iturrioz a Buenos Aires. Y que prosiguió con la bellísima cajita que le hicieron a Ana D, y el año pasado, con Vidania de La Buena Vida. La crisis disquera internacional no es ajena al sello porteño, menos en un país en que la legislación no admite la venta por tracks –posible salida para muchas casas-, sumada a la generosidad de Carreras con los artistas, que acabaron por cercenar otras posibilidades: “Índice Virgen sigue dando pérdida. Es un gran problema, sobre todo porque casi todo el catálogo es propiedad de cada artista y no del sello. A lo largo del tiempo ese altruismo puede ser suicida, porque al enfrentarte con otra generación de músicos te encontrás con que el sello sigue siendo chiquito y tiene poco para ofrecer a estos nuevos artistas”. Aunque diez años es una vida y algo de esa magia retornará en ciclos de festejo y nuevas ediciones. ¿Qué es lo que mejor recuerda Sebastián de la primera época? “Muchos shows de Leo García; el evento Suárez - Le Mans (donde Suárez en una velada memorable interpretó el repertorio de los de San Sebastián registrado luego en estudio); Entre Ríos…y descubrir que gente mucho más joven que yo, compró esos discos raros en su momento y hoy los sigue apreciando”.